Nuevas investigaciones sugieren que la vitamina D beneficia nuestra salud de más formas de las que se pensaba; ayuda a mantener la fuerza muscular e incluso protege contra enfermedades comunes.
Muchas personas del hemisferio norte sufren carencias de vitamina D durante los meses fríos. Se sabe que esto contribuye a la fatiga, la depresión, la debilidad ósea y una serie de otros efectos desagradables. Sin embargo, un aporte insuficiente de esta vitamina también puede afectar a la salud de otras formas más graves. Nuevas investigaciones sobre los beneficios de la vitamina D sugieren que puede ser un factor importante en la fuerza muscular, la salud gastrointestinal y la protección contra las enfermedades respiratorias.
La importancia de la vitamina D para la salud
La vitamina D es importante para la salud de muchas maneras. Actúa como cofactor de diversas reacciones bioquímicas, por lo que una carencia puede provocar cansancio y depresión. Sin embargo, esto es sólo el principio de los efectos de una carencia de vitamina D. Dado que la vitamina D es esencial para el crecimiento y el desarrollo de los huesos, una carencia suele manifestarse en forma de debilidad ósea. Los niños que no reciben suficiente vitamina D pueden desarrollar raquitismo, una enfermedad ósea en la que los huesos se vuelven tan blandos y débiles que se deforman con el peso. En los adultos, en cambio, la osteoporosis y el dolor de huesos son manifestaciones comunes de la carencia de vitamina D. La carencia de vitamina D también se ha relacionado con un mayor riesgo de síndrome metabólico y otras afecciones.
A pesar de su enorme importancia, muchas personas sufren una carencia de este importante nutriente. Por desgracia, la vitamina D sólo se encuentra en unos pocos alimentos y se procesa en el hígado y los riñones en un complicado proceso de varios pasos. Nuestra piel puede producir esta vitamina cuando se expone a determinadas longitudes de onda de la luz solar, pero muchas personas utilizan protección solar y, por tanto, no absorben esta vitamina. Alimentos como el aceite de hígado de bacalao, las yemas de huevo y la leche enriquecida contienen vitamina D, pero la mayoría de los adultos no la consumen en cantidades significativas. Como resultado, muchas personas sufren una carencia de vitamina D, que puede tener graves consecuencias para la salud.
Los beneficios de la vitamina D para los músculos
La vitamina D beneficia a huesos y dientes, pero un nuevo estudio sugiere que también puede tener un efecto positivo sobre la fuerza muscular. Se analizó la masa muscular, la fuerza muscular y los niveles de vitamina D en mujeres inactivas. Las mujeres con niveles altos de vitamina D tenían más masa muscular magra y más fuerza que las mujeres con niveles normales o bajos.
¿Deberían tomar más vitamina D las personas que quieren ganar fuerza o masa muscular? Los investigadores afirman que la decisión sigue abierta. El Dr. Zaki Hassan-Smith, uno de los investigadores principales de este estudio, señala: “Como estamos analizando múltiples formas en el mismo estudio, podemos decir que se trata de una relación más compleja de lo que se pensaba”. Sin embargo, sí parece existir una relación entre la vitamina D y los músculos, aunque aún se desconoce el mecanismo exacto.
¿Un nuevo tratamiento potencial para los trastornos gastrointestinales?
Los beneficios de la vitamina D podrían extenderse también al tracto digestivo, según las investigaciones más recientes. Los niveles bajos de vitamina D se han relacionado en el pasado con trastornos gastrointestinales como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Estas dolorosas afecciones afectan a millones de personas. No sólo pueden causar síntomas desagradables, como diarrea y dolor abdominal, sino también desnutrición. En algunos casos, los episodios de estas enfermedades pueden incluso poner en peligro la vida.
Dado que las enfermedades gastrointestinales pueden dificultar la absorción de vitaminas de los alimentos, se ha planteado el problema del “huevo y la gallina” en la relación entre un bajo nivel de vitamina D y los brotes de estas enfermedades. Sin embargo, los investigadores pueden haber resuelto el rompecabezas en un estudio reciente. Observaron a personas con colitis ulcerosa, analizaron periódicamente los niveles de vitamina D y registraron los síntomas y las reagudizaciones. Al parecer, los niveles bajos de vitamina D en personas con colitis ulcerosa aumentan la probabilidad de sufrir reagudizaciones dolorosas y potencialmente mortales de su enfermedad. Por tanto, un aporte adecuado de vitamina D parece ser especialmente importante para las personas que padecen colitis ulcerosa y otras enfermedades relacionadas.
Respirar mejor con una simple vitamina
Las enfermedades respiratorias agudas son una de las principales causas de muerte en todo el mundo. Incluso las personas sanas pueden enfermar gravemente a causa de estas infecciones, dejándolas temporal o permanentemente discapacitadas o incluso luchando por su vida. Nuevas investigaciones demuestran que la carencia de vitamina D es un factor de riesgo de las enfermedades respiratorias. Los científicos sospechan que la razón radica en la importancia crucial de la vitamina D para el sistema inmunitario. Cuando las personas tienen niveles bajos de vitamina D, su sistema inmunitario es menos capaz de combatir las infecciones que pueden provocar bronquitis y otras enfermedades graves.
Esta información podría salvar muchas vidas. Con 2,65 millones de personas que mueren cada año por enfermedades respiratorias agudas, identificar y eliminar este factor de riesgo puede tener un enorme impacto en la salud de la población. En este caso, un simple suplemento vitamínico puede salvar vidas incluso a personas del mundo desarrollado con una dieta equilibrada.
La vitamina D beneficia a nuestro organismo de muchas maneras y es esencial para una buena salud. Las personas que consideren que no están consumiendo suficiente vitamina D deben hablar con su médico sobre si un suplemento es adecuado para ellas y qué cantidad de suplemento necesitan para alcanzar una salud óptima. La salud de los huesos, los músculos, la digestión e incluso el sistema respiratorio depende de unos niveles elevados de esta vitamina tan importante.