Hay pocas actividades naturales que ofrezcan tantos beneficios para la salud y tan pocos riesgos como el sexo. El sexo es una actividad física muy segura, de bajo impacto y que desgasta poco las articulaciones, los huesos y los músculos. Sin embargo, los beneficios del sexo son de gran alcance: mejora la salud física, emocional, intelectual, social y psicológica de quienes lo practican.
La gran noticia sobre el sexo es que, una vez que se practica, se desea cada vez más. A muchas personas y parejas que acuden a terapia debido a la disminución de la interacción sexual o a la falta de deseo se les suele decir que simplemente vuelvan a tener relaciones sexuales para recuperar la libido perdida.
Además de aumentar la libido o el deseo sexual, ¿cuáles son otros beneficios del sexo para la salud? A continuación se enumeran diez de los efectos secundarios positivos más comunes y fáciles de observar de las relaciones sexuales y otras actividades íntimas.
Forma física
Salud cardiaca
Un estudio del American Journal of Cardiology afirma que los hombres que practican sexo dos veces por semana tienen menos riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares que los que no lo hacen. Sin embargo, no está claro si practicar sexo dos veces por semana es un beneficio de una buena salud cardiaca o si la buena salud cardiaca es el resultado de practicar sexo dos veces por semana. En cualquier caso, el menor riesgo de enfermedad cardiovascular de los hombres que practican sexo dos veces por semana es uno de los principales beneficios del sexo para la salud.
Dormir mejor
Cualquier mujer que haya tenido relaciones sexuales con un hombre es probablemente muy consciente de que un orgasmo le ayuda casi inmediatamente a dormir. Tras unos momentos de formalidades postcoitales, el hombre medio es capaz de dormitar rápidamente sin mucho esfuerzo. Para las mujeres, el sexo suele tener el efecto inmediato contrario. Sin embargo, a largo plazo y tras una cierta reducción de la energía post-sexual, las mujeres que mantienen relaciones sexuales también duermen mejor. Esto se debe principalmente a la liberación de la hormona oxitocina durante el orgasmo, una hormona que influye directamente en el sueño.
Alivio de los síntomas de la alergia
¿Le afecta la alergia estacional? Intente incorporar un poco más de sexo a su vida. Sorprendentemente, el sexo actúa como un antihistamínico natural, ayudando a desterrar síntomas incómodos como olfateos, estornudos y ojos llorosos.
Reducción de la presión arterial
Investigadores escoceses informaron en la revista Biological Psychology de que 24 mujeres y 22 hombres con una vida sexual activa que incluía el coito tenían una presión arterial más baja que sus homólogos no sexuales. En concreto, el estudio indicaba que quienes mantenían relaciones sexuales con frecuencia presentaban picos de presión arterial más bajos durante el estrés que quienes no practicaban sexo con regularidad, o que sólo mantenían relaciones sexuales sin coito.
Refuerzo de la inmunidad
¿Puede ser realmente el fortalecimiento del sistema inmunitario uno de los beneficios del sexo para la salud? Los estudios han demostrado que las personas que practican sexo una o más veces por semana tienen niveles significativamente más altos de inmunoglobulina A (IgA), que proporciona la “primera línea de defensa” del organismo contra las enfermedades.
Alivio del dolor
Reducción del riesgo de cáncer de próstata
Se ha indicado que los hombres que eyaculan 21 veces o más al mes tienen menos riesgo de padecer cáncer de próstata, según el Journal of the American Medical Association. Es necesario seguir estudiando este aspecto, pero los resultados preliminares son prometedores.
Mejora de la intimidad y las relaciones
La oxitocina, una hormona que también interviene en un sueño saludable, es conocida como la hormona del “amor”. La liberación de esta hormona durante el orgasmo forja y refuerza las conexiones empáticas, lo que se traduce en un vínculo más estrecho y sentimientos de amor entre la pareja.
Prevención de problemas menstruales y menopáusicos
Las mujeres que mantienen relaciones sexuales con frecuencia, ya sea en pareja o solas, presentan menos casos de endometriosis. Las que ya no menstrúan tienen menos sequedad vaginal posmenopáusica que las mujeres que no mantienen relaciones sexuales con regularidad. La actividad sexual y el orgasmo son maravillosos para la salud de los sistemas reproductor y urinario femeninos.