Es probable que conozca algunos de los problemas de salud de la menopausia más comunes y de los que más se habla, como los sofocos y los cambios de humor, pero también hay muchos otros que quizá desconozca. Si es mujer, no puede eludir el hecho de que acabará pasando por la menopausia, pero saber todo lo posible sobre lo que puede esperar puede prepararla para este inevitable “cambio de vida” y darle las herramientas que necesita para que la transición sea lo más cómoda posible.
1. La diabetes: Uno de los problemas de salud de la menopausia de más rápido crecimiento
El mayor factor de riesgo para desarrollar diabetes de tipo 2 es el sobrepeso o la obesidad. Sin embargo, independientemente del peso, la menopausia puede aumentar el riesgo. Por supuesto, esto puede explicarse fácilmente por el hecho de que tener más de 40 años aumenta el riesgo de padecer diabetes de tipo 2, y es durante esta franja de edad cuando se produce la menopausia.
Si tiene sobrepeso o es obeso, puede reducir considerablemente el riesgo de diabetes con sólo perder un 5% de su peso corporal. Para ello, lo mejor es evitar las bebidas y los alimentos azucarados y hacer mucho ejercicio.
2. Cardiopatías
Las cardiopatías son otro de los problemas de salud más graves de la menopausia. Los investigadores no creen que la menopausia provoque enfermedades cardiacas per se, pero ambas parecen estar correlacionadas. El riesgo de cardiopatía aumenta con la edad en todo el mundo, pero, como hemos visto con la diabetes, la menopausia parece afectar a la salud del corazón independientemente de la edad que se tenga.
Los científicos creen que la presencia de estrógenos es beneficiosa para la capa interna de las paredes arteriales, ya que mantiene las arterias flexibles. Con poco o ningún estrógeno circulando por el cuerpo, las arterias pueden volverse menos flexibles. Otros cambios que se producen durante la menopausia y que pueden aumentar el riesgo de cardiopatías son el aumento de la tensión arterial, el aumento de los triglicéridos en sangre, el aumento del colesterol “malo” y la disminución del colesterol “bueno”.
Las cardiopatías se pueden prevenir fácilmente controlando el peso, comiendo mucha fruta y verdura, haciendo mucho ejercicio y no fumando.
3. Osteoporosis
La osteoporosis está estrechamente relacionada con la menopausia. La osteoporosis es una enfermedad que se caracteriza por la pérdida de masa ósea y de resistencia de los huesos. Muy a menudo, la enfermedad progresa sin síntomas perceptibles. Por ello, algunas personas no saben que padecen osteoporosis hasta que sufren una fractura por algo que normalmente no habría dañado sus huesos, como una caída corta o una vértebra colapsada. Las vértebras colapsadas producen síntomas como pérdida de altura, deformidades de la columna y fuertes dolores de espalda.
Puede reducir el riesgo de desarrollar osteoporosis realizando regularmente ejercicios de fuerza y consumiendo abundante calcio y vitamina D.
4. Atrofia vaginal
Es bien sabido que la menopausia provoca sequedad vaginal. Éste puede ser uno de los problemas de salud más molestos de la menopausia, ya que puede reducir en gran medida el disfrute de las relaciones sexuales. Sin embargo, la sequedad vaginal es sólo un posible síntoma de un conjunto de síntomas conocidos como atrofia vaginal.
La atrofia vaginal consiste en una inflamación general de la vagina y las vías urinarias externas. Sin estrógenos suficientes, los tejidos de la vagina se vuelven más finos, más secos y menos elásticos. Además de la típica sequedad vaginal y las molestias durante las relaciones sexuales, la atrofia vaginal también puede provocar infecciones de las vías urinarias o la vagina, flujo, sensación de quemazón o picor, incontinencia urinaria, contracción del canal vaginal y sangrado después de las relaciones sexuales.
La atrofia vaginal puede tratarse fácilmente con estrógenos aplicados por vía vaginal, a menudo en forma de comprimidos o crema. Curiosamente, los investigadores han descubierto que las mujeres que nunca han tenido un parto vaginal tienen más riesgo de desarrollar atrofia vaginal que las que sí lo han tenido.